Con el fin de inhibir el cruce irregular de migrantes de Ciudad Juárez a El Paso, militares de Estados Unidos trabajaron ayer por segundo día consecutivo en la reposición del muro de alambre dañado en el bordo del río Grande.
Con ayuda de maquinaria, los soldados que portaban uniformes militares del Ejército de Estados Unidos (Army), así como elementos de la Guardia Nacional de Texas, retiraron los rollos de alambres de concertina a la altura de los marcadores internacionales números 29 y 30, en donde colocaron nuevos rollos para formar el muro.
El trabajo que se observó durante lunes y martes se llevó a cabo en la zona donde termina el muro y comienza la malla fronteriza, al oriente de la Plaza de la Mexicanidad.
Equipados con guantes y cascos, primero cortaron con pinzas los rollos de alambre dañado, los cuales estaban atados a bases metálicas, y después de retirar el alambre con la maquinaria volvieron a crear el muro que fue ordenado por el gobernador Greg Abbott, durante la administración de Joe Biden.
En total, fueron colocados tres rollos, uno sobre otro, con una altura aproximada de dos metros, justo en los límites del río internacional que divide a México de Estados Unidos, llamado río Grande por los estadounidenses y río Bravo del lado mexicano.
El alambre de concertina, es un espiral metálico con cuchillas de acero que produce cortes al contacto con la piel y se atora en la tela, por lo que es utilizado como método de disuasión desde 2022, para que las personas no crucen la frontera entre Ciudad Juárez y El Paso de manera irregular.
La militarización en El Paso y el “muro de Abbott” con kilómetros de rollos de concertina y rejas metálicas rodeadas de púas comenzó el martes 20 de diciembre de 2022, por órdenes del gobernador de Texas, con el objetivo de evitar la migración irregular desde Ciudad Juárez.
La primera zona en la que se colocaron decenas de agentes de la Guardia Nacional y la Policía texana, tanquetas militares, rejas metálicas, contenedores de carga y alambre de púas fue a la altura de la calle Oro.
En enero de 2023 la barrera y la presencia militar se extendió hacia el área del parque de Las Tortugas, al norponiente de la ciudad. Y el año pasado avanzó hacia el oriente, desde el marcador internacional número 1 hasta el 50, principalmente entre las llamadas “puerta 36” y “puerta 40”, los dos principales puntos de cruce irregular que fueron utilizados por los migrantes durante 2023 y 2024 a través de la frontera de Ciudad Juárez y El Paso.
De acuerdo con las últimas estadísticas mensuales, en marzo los agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (USBP) del Sector El Paso detuvieron a mil 627 personas migrantes que cruzaron la frontera de manera irregular, 94.7 por ciento menos que las 30 mil 421 detenciones realizadas en marzo del año pasado.
Pero, aun con la disminución en los cruces irregulares, en marzo El Paso fue el sector con más detenciones a lo largo de la frontera con México; seguido de San Diego –frontera con Tijuana– con mil 199 cruces, y Valle del Río Grande –en la frontera con Tamaulipas–, con mil 107 detenciones, por lo que continuó el reforzamiento de la frontera con tanquetas militares entre Sunland Park y Ciudad Juárez. (Hérika Martínez Prado / El Diario)
Información de El Diario de Juárez