Dos agentes de la Oficina de Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) en el sur de California fueron acusados de aceptar miles de dólares en sobornos para permitir el ingreso de personas a través del puerto de entrada terrestre más transitado del país sin presentar la documentación correspondiente, según la fiscalía.
Los agentes, Farlis Almonte y Ricardo Rodríguez, fueron acusados el 24 de marzo de conspiración para la importación de extranjeros con fines lucrativos, importación de extranjeros con fines lucrativos y aceptación de sobornos por parte de un funcionario público, según la Fiscalía Federal para el Distrito Sur de California.
Se inició una investigación después de que varios contrabandistas arrestados en septiembre declararan a los investigadores que habían estado trabajando con inspectores fronterizos estadounidenses, según una denuncia penal que se hizo pública el 25 de marzo.
Como agentes de la CBP, Almonte y Rodríguez fueron asignados a las cabinas de inspección de inmigración en el puerto de entrada de San Ysidro, en el sur de California, según la denuncia.
Fueron acusados después de que los investigadores encontraran mensajes de texto que demostraban que habían informado a traficantes de personas en México cuándo tenían previsto trabajar y a qué carriles se les asignaron a cambio de miles de dólares, según la denuncia.
El esquema duró desde agosto de 2024 hasta enero de 2025, según la fiscalía. Los investigadores indicaron que ambos hombres depositaron “cantidades anormales de efectivo en la segunda mitad de 2024” en sus cuentas.
Almonte aparentemente depositó casi 22,000 dólares en efectivo, divididos en pequeños depósitos, mientras que Rodríguez depositó alrededor de 24,000 dólares, también en pequeños depósitos, según los investigadores.
Después de que Almonte fuera detenido, los investigadores incautaron casi 70,000 dólares en efectivo que, según creen, su pareja intentaba trasladar a Tijuana, informó The San Diego Union-Tribune.
En un caso, durante una noche de diciembre, un conductor con cuatro pasajeros ingresó a un carril que Almonte vigilaba cuando le presentaron una identificación y “observó que los documentos no parecían haber sido emitidos a los pasajeros”, pero aun así los dejó pasar, según la denuncia.
“Posteriormente se determinó que esos cuatro eran extranjeros sin documentos que les permitieran ingresar o permanecer en Estados Unidos”, según la denuncia.
En otro episodio, un video de vigilancia grabó un vehículo con un conductor y un pasajero en un puesto de control, pero solo el conductor tenía la documentación en regla, según la denuncia.
Los agentes “incumplieron con sus deberes oficiales, admitiendo a menudo sin una inspección significativa vehículos con varios pasajeros, mientras documentaban que solo los conductores estaban presentes”.
Los abogados de Almonte y Rodríguez no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios el lunes.
“Cualquier agente de Aduanas y Protección Fronteriza que ayude o ignore a los contrabandistas que traen inmigrantes indocumentados a Estados Unidos está traicionando su juramento y poniendo en peligro nuestra seguridad nacional”, declaró el fiscal federal interino del Distrito Sur de California, Andrew Haden, en un comunicado. “Quienes incurran en tal mala conducta serán responsables con todo el peso de la ley”.
Con información de El Diario de Juárez