EL DESCARRILAMIENTO DE UN TREN CON TÓXICOS CAUSÓ GRAVE CONTAMINACIÓN EN EXTENSA ZONA DE OHIO
Un tren que transportaba productos químicos tóxicos tuvo un descarrilamiento en East Palestine, entre Ohio y Pensilvania, el pasado viernes 3 de febrero, mantiene en alerta a especialistas, mientras los habitantes de la zona tuvieron que evacuar ante el riesgo de la contaminación.
Desde el accidente, autoridades de Ohio han liberado de forma controlada material tóxico de varios vagones que tenían el riesgo de estallar y causar estragos en los alrededores, informaron medios locales.
Sin embargo, una semana después de que una quema controlada de productos químicos, el Distrito de Salud del Condado de Columbiana confirma que se están realizando pruebas de agua de pozo privado después de que se encontraron productos químicos en Sulphur Creek y Lesley Run Creek. Las autoridades dicen que esos arroyos es donde aparecieron decenas de peces muertos después de que los productos químicos se filtraran de los vagones cisterna dañados tras el descarrilamiento del tren Norfolk Southern la semana pasada, y corren muy cerca de los pozos residenciales.
Según The Washington Post, cinco de los cerca de 50 vagones cisterna descarrilados en Ohio transportaban cloruro de vinilo, un químico peligroso, que es utilizado en Estados Unidos para la fabricación de plásticos como revestimientos de cables o materiales de embalaje.
Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos asegura que respirar o ingerir este químico durante periodos prolongados puede provocar tipos de cáncer, como de pulmón, hígado, sangre, entre otros.
Incluso, la quema de este químico, que libera cloruro de hidrógeno y fosgeno, puede ser muy letal. El fosgeno es un gas incoloro muy tóxico que fue utilizado como arma durante la Primera Guerra Mundial. De ahí que expertos han equiparado el incidente con lo ocurrido en Chernobyl, en 1986, que tuvo un impacto negativo en la salud y la vida de muchas personas y en el medio ambiente.
Por ello, las autoridades afirmar que llevan a cabo un proceso de liberación controlada que implica la quema de los productos químicos de los vagones, que liberan vapores al aire que pueden ser mortales si se inhalan.
Según los patrones climáticos actuales y el flujo esperado de humo y vapores, cualquier persona que permanezca en el área roja afectada corre un grave peligro de muerte. Cualquiera que permanezca en el área afectada corre un alto riesgo de sufrir lesiones graves, incluidas quemaduras en la piel y daño pulmonar grave.
Uno de los principales químicos que se quemaron es el cloruro de vinilo, que está asociado a riesgos de cáncer de hígado según estudios que monitorearon el efecto de una exposición prolongada en trabajadores de fábricas que trabajan con esta sustancia, y que mostraron un aumento en el riesgo de cáncer para quienes trabajaron durante más tiempo o para quienes se expusieron a mayores niveles.
Otro problema resultante del accidente es la quema controlada de este químico, que generó otras toxinas en el aire que en altas concentraciones pueden ser peligrosas. Una de ellas es el fosgeno, que tiene un fuerte olor y que fue utilizado en la Primera Guerra Mundial como agente asfixiante. Otro es el cloruro de hidrógeno, que tiene un fuerte olor y puede provocar irritación en la piel, ojos, nariz y garganta.
Un experto consultado por el New York Times también mencionó el riesgo por la posible presencia de dioxinas, que son compuestos químicos generados a partir de procesos de combustión que impliquen el cloro, y que son contaminantes ambientales persistentes que se albergan por años en el suelo y en el cuerpo humano.